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¿Cómo afecta el calor a la salud de los migrantes que trabajan en la agricultura del sur de Europa?

15.5.2025
CATALYSE
Foto: Neal Haddaway / www.nealhaddaway.com 2025 - Almería

CATALYSE estudia cómo las altas temperaturas afectan la salud de los migrantes agrícolas en Europa y propone medidas de adaptación climática centradas en la salud.

 

¿Cómo afecta el cambio climático a la salud de las personas migrantes que trabajan en la agricultura? ¿Y cómo pueden los sistemas sanitarios responder mejor a esta realidad? Desde el proyecto europeo CATALYSE, exploramos estas preguntas en tres países clave: España, Italia y Austria. Nuestro objetivo es poner la salud en el centro de la adaptación climática, especialmente para quienes se encuentran en las situaciones más vulnerables.

Agricultura, migración y calor: el caso de Almería

Cada año, más de 800.000 personas trabajan en empleos agrícolas temporales al aire libre en Europa. Muchas de estas personas son migrantes. En Almería, al sur de España, esta realidad se hace especialmente visible. Con más de 33.000 hectáreas de invernaderos —la llamada “huerta de Europa” por unos o el “mar de plástico” por otros—, la provincia concentra la mayor producción hortofrutícola del país y también una de las mayores poblaciones de trabajadores migrantes. Cerca del 20% de la población es de origen extranjero, y muchos viven en condiciones precarias, en asentamientos informales sin acceso a agua potable, electricidad o infraestructuras básicas.

"Mar de plástico" en Almería. (c) Neal Haddaway / www.nealhaddaway.com 2025

En este contexto, el calor se convierte en un riesgo silencioso. Quienes trabajan bajo el plástico durante el día y duermen en chabolas de plástico por la noche soportan en verano temperaturas que superan los 40 °C sin posibilidad de resguardarse. Esto no solo agrava los riesgos de enfermedades relacionadas con el agua, el saneamiento y la higiene, sino también de enfermedades relacionadas con el calor.

Entender mejor la vulnerabilidad

Desde CATALYSE, hemos realizado ya más de 400 encuestas y 22 entrevistas en España, Italia y Austria para entender mejor cómo perciben los trabajadores migrantes los riesgos del calor, cómo acceden a la atención sanitaria y a qué barreras se enfrentan. En Almería, también nos reunimos con personal sanitario de centros de atención primaria para conocer su experiencia con esta población.

La información recogida se utilizará para desarrollar materiales formativos, guías e intervenciones, con el fin de ayudar a los sistemas de salud a adaptarse mejor a las necesidades de estas comunidades.

Una visita al terreno para escuchar a los actores locales

En marzo de 2025, realizamos una visita a Almería para reunirnos con organizaciones locales, sindicatos, profesionales de la salud y ONG. Queríamos conocer el contexto político y social, las iniciativas en marcha y explorar cómo los resultados de CATALYSE pueden contribuir a mejorar la situación. La reciente publicación del Plan Estratégico para la Erradicación de los Asentamientos Informales por parte de la Junta de Andalucía abre una oportunidad clave para integrar la salud como eje de acción.

Almería. (c) Neal Haddaway / www.nealhaddaway.com 2025

Adaptación climática enfocada en la salud

El cambio climático no afecta a todas las personas por igual. En el caso de los trabajadores migrantes en el sector agrícola, la exposición al calor se combina con otras formas de vulnerabilidad: condiciones de vida precarias, empleo informal, barreras lingüísticas o legales.

El objetivo de CATALYSE es promover una adaptación climática que ponga en el centro la salud y los derechos de las personas más expuesta y transformar las pruebas científicas en impacto social para dar voz a quienes a menudo no son escuchados.

Lo que hemos encontrado hasta ahora

Hasta ahora, en España hemos realizado 300 entrevistas con trabajadores agrícolas migrantes en Almería y Lérida durante el verano de 2024. Los resultados iniciales muestran que la mayoría de los participantes eran hombres (94,7%) y procedían principalmente de Senegal (25%), Marruecos (24%) y Colombia (14%). Casi la mitad (42,3%) informó haber experimentado al menos tres síntomas relacionados con enfermedades por calor durante la temporada de verano, con una mayor prevalencia en Almería (59,1%) que en Lérida (30%). Aunque los síntomas más comunes fueron la sed (59%), el dolor de cabeza (54,7%) y los calambres musculares (37,3%), solo el 8% buscó atención médica. La mayoría reconoció el calor como un riesgo para la salud y apoyó medidas preventivas como el uso de ropa adecuada (76,3%) y la hidratación (el 94% bebió al menos 2 litros de agua).