Publicador de contenidos
javax.portlet.title.customblogportlet_WAR_customblogportlet (Blog Health is Global)

Unos socios fuertes convierten a la malaria en una especie en peligro de extinción en Kabuyu

01.5.2015

[Esta entrada es parte de la serie de blogs Día Mundial de la Malaria 2015 que coordina Roll Back Malaria y que se publican entre el 8 de abril y el 1 de mayo de 2015]

El sol ya estaba bien alto en el cielo, en la brillante y azul mañana del día antes del Día Mundial de la Malaria. Dignatarios y responsables de salud pública se reunían bajo carpas, donadas por el Chief Mukuni, delante de la escuela primaria de Kabuyu, en cuya pared todavía se estaba secando un anuncio sobre la celebración del Día Mundial de la Malaria. Asistieron personas de todo el mundo para conocer cómo se han enfrentado a la malaria los profesionales de la salud de Kabuyu -pertenecientes al Ministerio de Sanidad de Zambia y al Ministerio para el Desarrollo Communitario y la Salud Materna e Infantil del mismo país- y han conseguido reducir los índices de infección por malaria a mínimos históricos. Quieren aprender cómo lo logró Kabuyu, de modo que los esfuerzos para la eliminación de la malaria que hayan demostrado su eficacia puedan ser replicados en cualquier otro lugar.

Kabuyu es una zona geográfica de actuación en el área de la salud situada en el distrito de Kazungula, 50 km al norte de una zona muy turística, Livingstone, uno de los lugares de paso más habituales entre quienes se dirigen a las Cataratas Victoria. Se trata de una comunidad rural de granjeros y pescadores que está muy orgullosa de sus instalaciones sanitarias, con dos camas, a una distancia que puede cubrirse a pie desde la escuela. El centro de salud más cercano está situado a 26 km, una distancia que puede llevar más de un día recorrer durante la estación lluviosa. 

A pesar de tales distancias, la malaria no se ha situado entre las diez enfermedades más frecuentes en Kabuyu desde el año 2009, y en el distrito de Kazungula no se ha declarado ninguna muerte relacionada con la malaria desde el mismo año. ¿Cómo es posible?

Entre las intervenciones contra la malaria llevadas a cabo en Kabuyu se incluían las habituales: pruebas de diagnóstico rápido de la malaria y tratamiento rápido en las instalaciones sanitarias, distribución permanente de mosquiteras para cama y fumigación de interiores con efecto residual. Pero lo que convierte a Kabuyu en único es el sistema de vigilancia comunitaria y de detección reactiva de casos establecido en el el año 2012. Los trabajadores de salud de la comunidad (CHWs, según sus siglas en inglés) reciben formación para detectar y tratar a los miembros de la comunidad con síntomas de malaria. Si una prueba da positivo, el CHW visita el hogar de la persona afectada y realiza pruebas a todos los miembros del hogar y a todas las personas que vivan en un radio de 140 metros alrededor de la casa (aproximadamente el tamaño de un campo de fútbol). La razón para actuar de ese modo es que los mosquitos no se desplazan a gran distancia después de picar y alimentarse de alguien; por lo tanto, con el objetivo de evitar que propaguen la enfermedad a un miembro de la familia o a un vecino, se realizan las pruebas en torno al hogar para reducir el reservorio de parásitos. Durante este año se han hecho análisis a 221 miembros de la comunidad en hogares y en clínicas. De estos, solo el 2,2% dieron positivo en malaria, una reducción del 4,6% en comparación con el año 2014.

Los índices de malaria de Kabuyu son bajos gracias a la importante acción comunitaria y a la utilización de estrategias estándar para el control de la malaria, así como al hecho de que las personas se dirigen a su CHW local para que les haga análisis y les proporcione tratamiento, en lugar de emprender una larga caminata hasta el centro de salud. Los bajos índices de infección por malaria se mantienen porque los CHWs llevan a cabo la detección reactiva de casos. Los CHWs eliminan cualquier infección desde su foco inicial, con lo que reducen los parásitos presentes en la comunidad en general: si prácticamente no hay parásitos, las infecciones por malaria no pueden propagarse fácilmente mediante las picaduras de mosquito. No resulta sorprendente, por lo tanto, que todas las personas de entre las docenas a quienes se realizaron análisis en la celebración dieran negativo por malaria.

Conseguir que las cifras se sitúen prácticamente a cero requiere muchísima energía y una cooperación muy próxima entre varios actores: la President’s Malaria Intiative para coordinar la fumigación de interiores con efecto residual; el National Malaria Control Center para proporcionar entomólogos que capturen mosquitos y midan qué clases y qué cantidad de ellos están infectados por la malaria; el Malaria Focal Point del distrito y sus compañeros de trabajo, que actúan en estrecha cooperación con líderes de la comunidad para formar y reforzar el compromiso con la eliminación de la malaria a la vista de la disminución de los casos de la enfermedad; MACEPA y Akros para apoyar la formación local de CHWs que suministren servicios sanitarios y actividades de monitorización más cerca de los hogares; el personal adulto de la escuela primaria de Kabuyu; Chief Mukuni, cuyo firme apoyo en la eliminación de la malaria se ha hecho un hueco en el liderazgo tradicional de los jefes de aldea; y las colaboraciones con organizaciones religiosas y organizaciones transfronterizas en el ámbito de la malaria, un aspecto fundamental dado que Kabuyu se encuentra a menos de 50 kilómetros del Río Zambezi, la frontera con Botswana.

 “La comunidad global de la malaria puede aprender mucho del ejemplo de Kabuyu”, afirmó Duncan Earle, Director de Programas de País de MACEPA. La realidad es que la eliminación se llevará a cabo, en primer lugar, a nivel comunitario, y la estrecha cooperación entre los trabajadores de salud y las comunidades a las que sirven será fundamentales. Los socios técnicos en el gobierno y el conjunto de la comunidad para el control y la eliminación de la malaria deben priorizar su apoyo teniendo este aspecto en mente, de modo que todas y cada una de las 7.000 personas que viven en Kabuyu puedan estar s de la malaria. Capacitar a las comunidades como Kabuyu para controlar su propio destino en el ámbito de la malaria será esencial para lograr la eliminación de la malaria en el conjunto de Zambia: Kabuyu nos lo demuestra.

Al trabajar codo con codo con el objetivo de eliminar la malaria, más y más lugares en Zambia y en la región empezarán a parecerse a Kabuyu. Hacia el final de la celebración, varios alumnos vestidos con uniformes perfectamente planchados leyeron poemas en Tonga, el idioma local. La poesía sobre la malaria es una actividad conmemorativa habitual en el Día Mundial de la Malaria, pero a diferencia de los poemas habituales, estos no trataban de la experiencia en primera persona de un niño que había contraído la enfermedad. Estos estudiantes han crecido en una comunidad que ya no sufre malaria, con lo que hoy sus poemas incluían las estadísticas que reflejan su victoria contra esta enfermedad evitable.