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Investigación

Los niños y niñas del Proyecto INMA: haciendo avanzar la ciencia desde antes de nacer

Sabadell acoge las jornadas científicas INMA – Infancia y Medio Ambiente los días 27 y 28 de octubre

27.10.2016

Tienen entre 9 y 18 años, viven en siete regiones diferentes de España y todos ellos tienen un mismo rasgo en común: llevan haciendo contribuciones anónimas a la ciencia desde antes de su nacimiento. Los cerca de 3.900 niños y niñas que participan en el Proyecto INMA fueron reclutados cuando sus madres estaban en la 12ª semana de gestación. Entre todos, integran las siete cohortes de nacimiento que han hecho posible más de una década de estudios científicos y más de 340 publicaciones sobre los efectos de diversas exposiciones ambientales sobre la salud infantil.

Gracias a la contribución desinteresada de todas estas familias, los científicos del Proyecto INMA mantienen diversas líneas de investigación en áreas como la salud respiratoria, la salud mental o la obesidad. Desde el establecimiento de estas cohortes de nacimiento en el año 2003, están analizando cómo afectan a la salud infantil algunas de las exposiciones ambientales con que los niños conviven diariamente, como la contaminación del aire y del agua, el tabaco, los compuestos orgánicos persistentes, los pesticidas, los contaminantes en la dieta (los metales, como el mercurio, en el pescado) e, incluso, determinados medicamentos.

70 científicos que participan en el Proyecto INMA se reúnen los días 27 y 28 de octubre en Sabadell para compartir y debatir los últimos resultados a que ha dado lugar el trabajo con las siete cohortes de nacimiento que integran el proyecto. En el último año, INMA ha permitido conocer que la contaminación del aire tiene un efecto sobre el desarrollo del feto, así como en el pulmón y el cerebro del niño, lo que confirma que es el mayor de los riesgos para la salud infantil. También ha concluido que el tabaquismo pasivo durante el embarazo está asociado con un mayor riesgo de problemas respiratorios en niños o que la obesidad infantil es el primer trastorno de salud en nuestros niños. Otro estudio halló una asociación entre exposición prenatal al paracetamol y un incremento de los síntomas del espectro autista y la hiperactividad en la infancia. 

La participación de los niños en el proyecto es completamente voluntaria y cuenta en todos los casos con la autorización de los padres. La aportación de los menores varía en función del tipo de estudio a realizar y puede ir desde someterse a un simple análisis de sangre o de orina a realizar tests para medir el desarrollo cognitivo o a llevar una mochila para medir la contaminación atmosférica en su entorno.

“La celebración de les jornadas científicas de INMA en Sabadell es también una oportunidad para dar a conocer la contribución tan valiosa que todos estos niños y niñas están haciendo a la ciencia”, afirma Jordi Sunyer, el investigador del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) que dirige el proyecto. “Gracias a todos ellos estamos siendo capaces de producir un cuerpo creciente de evidencias científicas que eventualmente habrán de traducirse en políticas de salud pública que nos ayuden a vivir en entornos más saludables”, añade.

Un ejemplo de administración implicada con el Proyecto INMA es el Ayuntamiento de Sabadell, que  participó activamente en el establecimiento de la que hoy es una de las cohortes más numerosas del estado y que colabora también en la organización de les jornadas científicas. “Consideramos que este es un proyecto fundamental, en tanto que proporciona la información necesaria para tomar las decisiones más favorables para  la salud de nuestros niños y niñas. En este sentido, los resultados de los estudios de INMA ya están influyendo en la elaboración de diversas políticas municipales, como el Plan de Calidad del Aire”, ha manifestado Ramon Vidal, concejal de Salud de la ciudad.